Recuperación de una Apendicitis – ⏰ Tiempo de lectura de 5 a 7 Minutos

La apendicectomía es la extirpación quirúrgica del apéndice, un pequeño tubo que se une al intestino grueso y se encuentra en la parte inferior derecha del vientre. Puede ser necesario extirpar el apéndice si tiene síntomas de apendicitis (una inflamación o infección de la pared del apéndice causada por bacterias, virus o una obstrucción intestinal).

El síntoma principal es el dolor abdominal, que suele producirse en la parte inferior derecha del abdomen, pero que también puede empezar alrededor del ombligo y desplazarse a la parte inferior derecha del abdomen. También puede haber fiebre, hinchazón, náuseas, diarrea o incluso estreñimiento.

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La recuperación de una apendicitis depende de varios factores, como la gravedad de la inflamación, si se desarrollaron complicaciones y el tipo de tratamiento recibido (cirugía o tratamiento no quirúrgico). Aquí están los principales pasos para la recuperación después de una apendicitis:

1. Hospitalización y tratamiento inicial: Si se diagnostica una apendicitis aguda, es probable que se requiera hospitalización de emergencia. En algunos casos, se puede optar por un tratamiento inicial con antibióticos si la inflamación no es severa y no hay complicaciones. Sin embargo, en la mayoría de los casos, se recomendará la extirpación quirúrgica del apéndice (apendicectomía).
2. Cirugía (apendicectomía): Si se realiza una apendicectomía, el apéndice inflamado se eliminará quirúrgicamente. La cirugía puede realizarse mediante una incisión abdominal tradicional (apendicectomía abierta) o mediante técnicas mínimamente invasivas, como la laparoscopia (apendicectomía laparoscópica). La recuperación puede ser más rápida con la laparoscopia debido a incisiones más pequeñas y menos traumatismo tisular.
3. Estancia hospitalaria: Después de la cirugía, es probable que necesites permanecer en el hospital por un período de tiempo breve para ser monitoreado de cerca y recibir tratamiento para el dolor y la inflamación.
4. Manejo del dolor: Después de la cirugía, es normal experimentar dolor abdominal, que puede controlarse con medicamentos recetados por el médico, como analgésicos opiáceos o antiinflamatorios no esteroides (AINEs). También se pueden usar compresas calientes en el abdomen para aliviar el malestar.
5. Reinicio de la dieta: Es posible que inicialmente se te permita solo líquidos claros después de la cirugía para evitar la irritación del tracto gastrointestinal. Luego, se avanzará gradualmente a una dieta blanda y, finalmente, a una dieta regular según la tolerancia individual.
6. Movilización temprana: Es importante comenzar a moverse y caminar tan pronto como sea posible después de la cirugía para prevenir complicaciones como la formación de coágulos sanguíneos y promover una recuperación más rápida.
7. Seguimiento médico: Es importante asistir a todas las citas de seguimiento con tu médico para monitorear la recuperación y asegurarse de que no haya complicaciones.
8. Evitar actividades extenuantes: Deberás evitar levantar objetos pesados, hacer ejercicio extenuante y actividades que puedan ejercer presión sobre la incisión abdominal durante varias semanas después de la cirugía para permitir una recuperación completa.
9. Atención a las complicaciones: Si experimentas síntomas como fiebre alta, dolor abdominal intenso, vómitos persistentes, inflamación o enrojecimiento alrededor de la incisión quirúrgica, o cambios en la función intestinal, debes comunicarte con tu médico de inmediato, ya que pueden ser signos de complicaciones.

Es importante seguir las instrucciones del médico y permitir que el cuerpo se recupere adecuadamente después de una apendicitis. Siempre consulta con un profesional de la salud para obtener orientación específica sobre tu caso individual.

Existen dos tipos de cirugía para la apendicitis: la apendicectomía abierta, en la que se realiza una incisión de varios centímetros en el abdomen para extirpar el apéndice, o la apendicectomía laparoscópica, en la que el apéndice se extirpa utilizando instrumentos finos e iluminados que se introducen en el vientre a través de pequeñas incisiones.

En ambas cirugías, recibirás anestesia general, pero el procedimiento quirúrgico que elija tu cirujano dependerá de una serie de factores, como la experiencia, si te has sometido a una cirugía abdominal antes y tu preferencia. En general, se prefiere el enfoque laparoscópico, ya que tiene una recuperación más rápida y menos dolor.

Antes de entrar en profundidad sobre la recuperación de una apendicitis, abordemos algunos temas como la gravedad de esta afección.

La apendicitis suele ser una urgencia médica y, como tal, la apendicectomía suele ser una cirugía de urgencia. Si un apéndice infectado estalla (también llamado apéndice perforado o roto), la infección puede extenderse a otras partes del cuerpo. Cuando la infección se extiende al interior del abdomen e irrita el revestimiento de la pared abdominal, por ejemplo, puede provocar una afección potencialmente mortal denominada peritonitis.

Si la infección llega al torrente sanguíneo, puede producirse una infección potencialmente mortal llamada sepsis. El apéndice puede reventar en las 48-72 horas siguientes a la aparición de los primeros síntomas, por lo que es importante no retrasar la búsqueda de tratamiento médico.

En general, alrededor de 1 de cada 1.000 personas al año padecen apendicitis, y es más frecuente en personas jóvenes de entre 10 y 30 años. No se sabe por qué algunas personas padecen apendicitis y otras no.

Tampoco está del todo claro qué función cumple el apéndice (algunos expertos dicen que podría albergar bacterias intestinales sanas); sin embargo, una persona puede llevar una vida sana sin uno.

La rapidez con la que te recuperas de una apendicectomía depende de si se trata de una intervención abierta o laparoscópica. Otros factores son tu estado de salud antes de la intervención, tu edad y si el apéndice se ha roto o no.

La mayoría de las personas abandonan el hospital en uno o dos días y, de hecho, muchas personas que se someten a una apendicectomía laparoscópica sin complicaciones pueden dejar el hospital el mismo día de la intervención.

Sin embargo, en lo que respecta al dolor, las personas que se someten a una apendicectomía abierta suelen tener una recuperación más difícil que las que se someten a una cirugía laparoscópica. «Esto se debe a que una apendicectomía abierta implica cortar la piel y la fascia (tejido conectivo de la pared abdominal) y dividir los músculos abdominales», explica el doctor Rana Pullatt, profesor de cirugía de la Universidad Médica de Carolina del Sur. «Es posible que se tenga un poco de dolor durante una semana. La apendicectomía laparoscópica, en cambio, consiste en utilizar principalmente orificios de punción. Se puede tener algo de dolor (alrededor de los agujeros) durante unas 24 horas y algo de dolor en el hombro por el gas que utilizamos.» Esto se debe a que el gas de dióxido de carbono empleado para distender el abdomen puede irritar los nervios que van desde el diafragma hasta el cuello y el hombro.

Y como señala la doctora Joanna Grudziak, cirujana general de University of Utah Health, las personas que se someten a una apendicectomía laparoscópica pueden sentirse mejor después de la cirugía que antes, porque se elimina el apéndice inflamado.

Cada persona es diferente en lo que respecta a su periodo de recuperación de una apendicitis. En general, sin embargo, la estancia en el hospital oscila entre unas pocas horas (muchos pacientes de laparoscopia reciben el alta el mismo día de la intervención) y unos pocos días (para la cirugía abierta). La recuperación general dura entre una y tres semanas en el caso de la apendicectomía laparoscópica (el tiempo medio de recuperación es de 13 días) y entre dos y cuatro semanas (a veces hasta seis) en el caso de la apendicectomía abierta.

Después de recibir el alta hospitalaria, puedes ayudar a acelerar el proceso de curación siguiendo algunos de estos consejos:

• Descansa cuando estés cansado. Tu cuerpo está trabajando duro para repararse. Es posible que necesites dormir más de lo habitual.
• Evite levantar objetos o realizar actividades extenuantes de tres a cinco días después de una apendicectomía laparoscópica y de 10 a 14 días después de una abierta. Puedes levantar cosas con las manos, pero no hagas nada que pueda forzar tu núcleo. Eso incluye levantar niños, mascotas, bolsas pesadas de la compra o cualquier cosa que tengas que agacharte para alcanzar.
• Intenta caminar un poco cada día, aumentando gradualmente la distancia. Además de ayudar a aliviar el estreñimiento, puede ayudar a prevenir los coágulos de sangre que pueden asociarse con la cirugía y la inmovilidad.
• No nades ni te sumerja en la bañera (aunque puedes ducharse) hasta que te hayan quitado los puntos o las tiras quirúrgicas, o hasta que se desprenda el pegamento que te cubre.
• Sigue las indicaciones de tu médico para limpiar y vendar la herida.
• No lleves ropa que pueda rozar la incisión.
• No conduzcas hasta que hayas dejado de tomar la medicación para el dolor y te hayas recuperado lo suficiente como para afrontar una situación de emergencia.

La mayoría de las personas pueden volver a sus actividades normales, como el trabajo o la escuela, en una o dos semanas si se han sometido a un procedimiento sin complicaciones. Si te sientes bien, puedes hacerlo.

Una vez que empieces a defecar con normalidad, los expertos dicen que puede retomar tu dieta habitual (incluidos el café y los alimentos picantes). Sin embargo, evita el alcohol si estás tomando antibióticos o analgésicos opiáceos.

Pero hasta que llegues a ese punto, algunos médicos sugieren una dieta blanda, baja en grasas y alta en fibra (la fibra promoverá movimientos intestinales regulares y contrarrestará los efectos de estreñimiento de algunos medicamentos para el dolor). Algunas sugerencias:

• Pollo asado.
• Tostadas secas.
• Yogur bajo en grasa.
• Arroz natural.

Y para favorecer las deposiciones regulares y mantenerse hidratado, también es importante beber de seis a ocho vasos de agua al día.

Las apendicectomías se consideran cirugías bastante seguras, pero pueden surgir complicaciones como infecciones de la incisión. Las apendicectomías abiertas son más propensas a provocar una infección de la incisión porque utilizan una incisión más grande y tardan más tiempo en realizarse. De hecho, las investigaciones demuestran que las incisiones quirúrgicas de la apendicectomía pueden infectarse en casi el 20% de las apendicectomías abiertas y sólo en el 1,5% de las laparoscópicas.

Independientemente del procedimiento al que te sometas, para una buena recuperación de una apendicitis, es importante mantener la incisión limpia y seca para ayudar a prevenir la infección. Por lo general, está bien ducharse entre 24 y 48 horas después de la operación, pero no debes nadar ni sumergirte en el agua hasta que te recuperes por completo, lo que puede llevar hasta seis semanas. Una buena nutrición también ayudará y fumar dificulta toda la curación, por lo que debe evitarse durante al menos seis semanas, o preferiblemente para siempre.

Sigue las instrucciones de tu médico sobre cuándo (o si) puedes quitarte los vendajes, y cuándo se te quitarán las grapas o los puntos, etc. Además, asegúrate de que quien cuide la herida (ya seas tú mismo o alguien que te ayude) se lave y se seque siempre las manos antes de tocar la incisión.

Los signos de infección son el enrojecimiento, el dolor, el pus o el mal olor que sale de la herida, así como la fiebre o los escalofríos.

Los medicamentos que recibas después de la apendicectomía dependerán en gran medida del procedimiento al que te sometas.

La mayoría de las personas recibirán algún tipo de medicación para el dolor después de la cirugía de apendicitis. Para una apendicectomía laparoscópica, se da ibuprofeno. Pero para una apendicectomía abierta, es más probable que se prescriban algunos días de medicamentos más fuertes. Todo depende de la tolerancia al dolor de la persona. Para ayudar a prevenir el estreñimiento que suele acompañar a las cirugías y al uso de analgésicos, el médico también puede recomendar el uso de un laxante.

Si has sufrido una rotura o perforación del apéndice, también recibirás antibióticos tras la operación. La mayoría de los médicos prescriben los antibióticos durante cuatro a siete días para ayudar a prevenir la infección en el lugar de la incisión, así como en otras partes del cuerpo. Las investigaciones demuestran que los abscesos postoperatorios (una dolorosa acumulación de pus) se producen entre el 4% y el 20% de las apendicectomías.

La mayoría de las personas se recuperan sin problemas de una apendicectomía, incluso cuando el apéndice se rompe o se ha realizado una apendicectomía abierta. Pero pueden surgir problemas. Llama a tu médico o busca atención médica si experimentas alguno de los siguientes síntomas:

• Dolor que empeora o no mejora después de tomar analgésicos
• Fiebre de 38º o más.
• Vómitos.
• Enrojecimiento, dolor o supuración de pus de la incisión que empeora, no mejora.
• Dificultad para respirar.
• Imposibilidad de comer o beber en el primer día de la intervención.
• No defecar en los dos días siguientes a la intervención.
• Diarrea.

Estos pueden ser signos de posibles complicaciones.